Voyage 34 es uno de los trabajos más únicos y experimentales de Porcupine Tree, lanzado originalmente en 1992 como una serie de dos maxi-singles de 12 pulgadas. Con el tiempo, el material se recopiló y se reeditó en formato de álbum en 2000, consolidándose como una de las obras más intrigantes dentro de la discografía de la banda.
Este trabajo es una fusión de space rock, ambient, trance y música psicodélica, inspirándose en los sonidos de bandas como Pink Floyd, The Orb y el krautrock de Tangerine Dream. Es un álbum instrumental y conceptual, estructurado en cuatro partes extendidas que narran, a través de samples y pasajes sonoros, la experiencia de un mal viaje de LSD.
El concepto de Voyage 34 gira en torno a la historia de un joven llamado Brian que decide experimentar con LSD en su “viaje número 34”. Lo que comienza como un estado de exploración y euforia termina convirtiéndose en un “mal viaje”, en el que su mente se disocia de la realidad. Esta narrativa se refuerza con samples de voces narrativas que describen los efectos de la droga, creando una experiencia inmersiva y cinematográfica.
Originalmente, Steven Wilson había concebido Voyage 34 como una pieza larga que formaría parte del álbum Up the Downstair (1993), pero finalmente decidió publicarla como un trabajo independiente.
• Steven Wilson – Guitarras, sintetizadores, samples, programación de batería, producción
• Richard Barbieri – Texturas y sintetizadores (en la reedición)
• Gavin Harrison – Mezcla y remasterización (en la reedición de 2000)
Aunque Porcupine Tree aún era principalmente el proyecto en solitario de Steven Wilson, Voyage 34 marca una de sus primeras exploraciones en el uso de samplers y loops electrónicos, anticipando algunas de las influencias que más tarde aparecerían en discos como Signify (1996).
1. “Phase I” (12:55) – La introducción del viaje. Inicia con una base rítmica relajante y guitarras flotantes, creando una atmósfera hipnótica. A lo largo del tema, se escuchan fragmentos narrativos describiendo el consumo de LSD y los efectos iniciales del viaje. Hacia el final, la música se vuelve más densa y comienza la transición al mal viaje.
2. “Phase II” (17:31) – Aquí el viaje entra en una fase más caótica. La música adopta un tono más oscuro y psicodélico, con efectos de delay y loops de guitarra envolventes. Se escuchan samples con frases como “Voyage 34 fue exitoso”, pero el tono de la narración insinúa que algo no está saliendo bien.
3. “Phase III” (19:29) – La sección más ambient del álbum. Se elimina casi por completo la percusión, dejando solo capas de sintetizadores y guitarras procesadas. Refleja la desconexión mental del protagonista con la realidad, con voces en off que describen los efectos disociativos de la droga.
4. “Phase IV” (19:47) – La resolución del viaje. Se introduce un ritmo más electrónico y pulsante, con elementos de trance que recuerdan a The Orb o Future Sound of London. Finalmente, la narración insinúa que el protagonista ha quedado atrapado en un estado mental alterado permanente.
Voyage 34 se ha convertido en un álbum de culto entre los seguidores de Porcupine Tree, especialmente aquellos interesados en su etapa más psicodélica y experimental. Su estructura instrumental extendida y el uso de elementos narrativos lo diferencian del resto del catálogo de la banda.
Si bien el álbum no alcanzó el mismo reconocimiento que discos posteriores como Stupid Dream (1999) o In Absentia (2002), es una pieza clave dentro de la evolución del sonido de Porcupine Tree. Muestra la transición de Wilson desde sus primeras exploraciones en el space rock hacia un sonido más progresivo y estructurado.
Voyage 34 es una obra fascinante dentro de la discografía de Porcupine Tree, explorando las posibilidades de la improvisación, la electrónica y la psicodelia en un formato conceptual único. Aunque no es un disco tradicional, es una experiencia sonora inmersiva que transporta al oyente a un mundo a