El álbum y concierto Unplugged de Eric Clapton es un hito no solo en la carrera del guitarrista británico, sino también en la historia de la música contemporánea. Grabado el 16 de enero de 1992 en los estudios de MTV en Windsor, Inglaterra, este concierto acústico fue un renacimiento para Clapton, tanto artística como emocionalmente, después de la tragedia personal que había vivido. Aclamado por la crítica y con ventas récord, Unplugged marcó un antes y un después en la carrera de Clapton, mostrando su capacidad para reinventarse a través de la vulnerabilidad musical.
A inicios de los 90, Clapton ya había vivido varias etapas musicales, desde su participación en bandas icónicas como Cream, The Yardbirds y Derek and the Dominos, hasta su exitosa carrera en solitario. Sin embargo, su vida personal estaba marcada por dificultades: adicciones, relaciones fallidas y, de manera devastadora, la pérdida de su hijo, Conor, en 1991. Este dolor indescriptible lo llevó a una profunda introspección, que se reflejaría en la música que interpretó durante su actuación en Unplugged.