Lanzado el 13 de marzo de 2001, Reptile es el decimocuarto álbum de estudio de Eric Clapton. En este trabajo, el legendario guitarrista británico explora una mezcla de blues, jazz, R&B y soft rock, con un enfoque más introspectivo y personal. El título del álbum hace referencia a un apodo que Clapton usaba para referirse a su tío Adrian, una figura clave en su infancia.
Este disco se distingue por su sonido elegante y por la participación de músicos de primer nivel, incluyendo a los legendarios The Impressions en los coros y a los habituales colaboradores de Clapton, como Nathan East (bajo) y Steve Gadd (batería). Reptile no es un álbum de grandes hits, sino más bien un conjunto de canciones que reflejan el lado más relajado y maduro de Clapton.
La producción estuvo a cargo de Clapton y Simon Climie, quien había trabajado en discos previos como Pilgrim (1998). En comparación con ese álbum, Reptile es más cálido y menos experimental en cuanto a la producción, evitando los efectos electrónicos y centrándose en arreglos orgánicos y una instrumentación sofisticada.
El disco es una mezcla de material original y versiones de clásicos del blues y R&B, con un sonido que oscila entre el smooth jazz, el blues tradicional y el soft rock. Hay una fuerte presencia de guitarras acústicas y eléctricas con un tono limpio, además de una instrumentación rica con pianos, órganos y secciones de viento.
1. “Reptile” – Una pieza instrumental con toques de jazz y bossa nova, que sirve como una introducción relajada y elegante al álbum.
2. “Got You on My Mind” – Un cover del tema de Joe Thomas y Howard Biggs, con una interpretación vocal suave y una instrumentación rica en matices de R&B.
3. “Travelin’ Light” – Versión del clásico de J.J. Cale, con una vibra relajada y una ejecución impecable en la guitarra.
4. “Believe in Life” – Una de las composiciones originales de Clapton en el álbum. Es una balada con arreglos acústicos y una atmósfera introspectiva.
5. “Come Back Baby” – Un homenaje al blues tradicional, con una interpretación cálida y un sonido vintage.
6. “Broken Down” – Otro tema original de Clapton, con un sonido melancólico y un estribillo pegajoso.
7. “Find Myself” – Una canción con un ritmo animado y toques de soul, en la que Clapton se muestra más relajado.
8. “I Ain’t Gonna Stand for It” – Cover de Stevie Wonder con una interpretación moderna y enérgica, con el inconfundible toque de Clapton.
9. “I Want a Little Girl” – Un blues clásico con una ejecución refinada y una producción minimalista que resalta la emotividad de la interpretación.
10. “Second Nature” – Otro de los temas originales, con un sonido cercano al soft rock y una melodía pegajosa.
11. “Don’t Let Me Be Lonely Tonight” – Balada de James Taylor con una interpretación íntima y un acompañamiento de piano suave.
12. “Modern Girl” – Un tema con un groove relajado y una instrumentación detallada.
13. “Superman Inside” – Una de las canciones más enérgicas del álbum, con un ritmo funk y coros pegajosos.
14. “Son & Sylvia” – Otro tema instrumental, cerrando el álbum con un aire de jazz suave y relajante.
Reptile recibió críticas mixtas en su lanzamiento. Mientras que algunos elogiaron su producción sofisticada y su sonido cálido, otros consideraron que el álbum carecía de la energía de sus trabajos anteriores. Comercialmente, tuvo un desempeño sólido, alcanzando el puesto #5 en la lista Billboard 200 y obteniendo certificaciones de oro y platino en varios países.
A pesar de no ser uno de sus álbumes más recordados, Reptile es una muestra del Clapton más maduro y relajado, explorando el blues y el jazz con una producción refinada.