En la década de los 90, el auge de la World Music llevó a la disquera Putumayo World Music a lanzar una serie de compilaciones que exploraban la riqueza de distintos géneros y tradiciones musicales alrededor del mundo. Cairo to Casablanca (1998) – An Arabic Musical Odissey – es uno de estos lanzamientos y se centra en la música de influencia árabe, abarcando una variedad de artistas y estilos provenientes del norte de África y Medio Oriente.
La compilación busca capturar la diversidad sonora de la música árabe, desde el pop magrebí y el rai hasta los ritmos tradicionales con matices contemporáneos. Se presenta como una auténtica odisea musical, explorando las influencias, sonidos y emociones que caracterizan a esta vasta región.
El álbum presenta una cuidada selección de temas que fusionan elementos tradicionales de la música árabe con influencias modernas como el pop, el rock y la electrónica. Se destacan los sonidos de instrumentos icónicos como el oud (laúd árabe), el qanun (salterio), el ney (flauta) y la darbuka (tambor de copa), junto con arreglos vocales melismáticos y ritmos hipnóticos.
La producción, como es característico de Putumayo, mantiene un balance entre la autenticidad cultural y la accesibilidad para una audiencia global, permitiendo que el oyente se sumerja en la esencia de la música árabe sin perder la conexión con sensibilidades contemporáneas.
El tema “Ki-Kounti” es una de las piezas más llamativas de Cairo to Casablanca, ya que representa una colaboración inusual pero poderosa entre Khaled, el “rey del rai” argelino, y Saúl Hernández, líder de Caifanes y Jaguares, dos de las bandas más influyentes del rock mexicano.
La unión de estos dos músicos de mundos tan distintos es un reflejo de la globalización musical que comenzaba a expandirse en los 90, donde artistas de diferentes culturas comenzaban a experimentar con nuevos sonidos y colaboraciones interculturales.
• Khaled: Un ícono de la música rai, género argelino que combina ritmos tradicionales con pop y rock. Su voz característica y su estilo dinámico han llevado la música árabe a escenarios internacionales.
• Saúl Hernández: Figura clave del rock en español, conocido por su voz inconfundible y su capacidad de transmitir emociones profundas en sus letras y melodías.
“Ki-Kounti” es un tema que combina elementos del rai argelino con el rock alternativo latinoamericano, logrando una fusión única.
• La base instrumental está dominada por percusión árabe y líneas de bajo profundo, creando un ritmo envolvente y bailable.
• La presencia de guitarras con tintes de rock aporta una textura que da peso a la canción, reflejando la influencia de Saúl Hernández.
• El uso de teclados y efectos electrónicos sutiles añade una atmósfera moderna sin perder la esencia tradicional.
• Khaled aporta su inconfundible voz melismática y llena de energía, con una interpretación emotiva en árabe.
• Saúl Hernández, en contraste, imprime su sello con un tono más grave y etéreo, evocando el estilo introspectivo y melancólico que caracteriza sus composiciones.
• La combinación de estos dos estilos vocales genera una tensión y una química única, haciendo que el tema sea memorable y poderoso.
El título “Ki-Kounti” podría traducirse como “Si fueras” o “Si hubieras sido”, dependiendo del contexto. La letra, como es común en la música rai, habla de temas de amor, nostalgia y anhelo, con un tono apasionado y melancólico.
Saúl Hernández añade un matiz poético y enigmático a la interpretación, fusionando la esencia del rock en español con la emotividad de la música árabe.
El álbum Cairo to Casablanca fue bien recibido por su capacidad de acercar la música árabe a un público más amplio. Si bien no tuvo un impacto masivo, fue reconocido en el circuito de World Music y sirvió como una ventana a la diversidad cultural de Medio Oriente y el norte de África.
• Expansión del rai: La colaboración con Saúl Hernández ayudó a exponer a Khaled a una audiencia hispanohablante que tal vez no estaba familiarizada con la música rai.
• Innovación en el rock latinoamericano: Fue una de las primeras ocasiones en las que un artista del rock en español se fusionó con la música árabe, abriendo el camino para futuras exploraciones musicales.
• Ejemplo de fusión cultural: La canción es un testimonio de cómo la música puede unir a artistas de diferentes partes del mundo en una misma expresión artística.
A pesar de no ser un éxito comercial masivo, “Ki-Kounti” sigue siendo una joya oculta dentro de la discografía de ambos artistas, y un ejemplo perfecto de la capacidad de la música para derribar fronteras culturales.
Cairo to Casablanca es una recopilación fascinante que encapsula la riqueza y diversidad de la música árabe, mientras que “Ki-Kounti” representa uno de los momentos más innovadores del disco al unir dos mundos aparentemente opuestos: el rai argelino y el rock latinoamericano.
Esta colaboración entre Khaled y Saúl Hernández sigue siendo un ejemplo de la capacidad transformadora de la música, mostrando que, más allá de los géneros y las barreras idiomáticas, la emoción y el arte pueden unir culturas en un solo ritmo.