Bajo el signo de Caín, lanzado en 1993, es uno de los trabajos más representativos y audaces de la carrera del icónico cantante español Miguel Bosé. Este álbum no solo marcó un punto de inflexión en su trayectoria, sino que también consolidó su reputación como un artista innovador y multifacético, capaz de desafiar las convenciones musicales y estéticas de su tiempo.
En los años previos al lanzamiento de Bajo el signo de Caín, Miguel Bosé ya había transitado por una serie de transformaciones estilísticas. Desde sus inicios como ídolo juvenil en la década de los 70, Bosé había evolucionado hacia un artista más maduro y experimental. Álbunes como Salamandra (1986) y Los chicos no lloran (1990) mostraron su capacidad para reinventarse, pero fue Bajo el signo de Caín el que verdaderamente rompió con su pasado.