El concierto de 1988, nominado al Grammy, fue restaurado, reeditado y remezclado a partir de las películas y cintas maestras originales. Filmado en el Nassau Coliseum (Long Island, NY) y con David Gilmour, Nick Mason y Richard Wright en su mejor momento, este evento cautivador y estimulante utiliza una innovadora combinación de iluminación y puesta en escena, equilibrando el material, entonces nuevo, con las canciones clásicas de Pink Floyd.